He viajado hasta ti / Aquí mismo lates.

He viajado hasta ti
ida y vuelta tantas veces
como así me lo ha permitido
el cuerpo.

Y eres todavía más guapo,
todavía más relámpago,
más trueno, más mar
de lo que recordaba.

Tus ojos son aún más dulces,
no sé cómo no te muerden las hormigas.

Tu sonrisa es aún más ancha,
tanto que nadie podría llegar a tener complejos,
porque se amolda a la misma medida
del amor que se le posa delante.

Yo, por supuesto te miro,
como si representaras la grandeza del mundo,
admirando lo vivo.

Como si mi corazón tuviese
un filtro de café
y sólo tú lo pasaras.

Y es que, tú no lo sabes,
pero aunque he viajado hasta ti tantas veces
aún sentirte en el pecho
resulta impensable.

Pero sí, aquí mismo,
justo aquí, en la equis y la cicatriz,
aquí mismo lates.

Solo,
como un tic tac agarrado a su aguja,
todo el tiempo que tú quieres latirme,
como si fueras un reloj que sigue en marcha
aunque se le gasten las pilas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

En el centro.

Por escuchar tu voz.

Las batallitas.