Trayectos.

"Tendríamos que reír más para evadirnos 
de la mierda que nos danza 
alrededor."

No te quito los ojos de encima
cuando te veo, y pienso en todo
aquello que te escribiría
pero que jamás te dejaría
leer.

De puntillas,
siempre despacio sin hacer ruido
me muevo a tu alrededor...
Siempre estoy detrás de ti,
observándote en silencio y
convirtiéndote en mi centro de
atención.

Me pierdo en el remolino
de tu pelo, en tu barba de
tres días y en la sonrisa
que nunca tienes en los
labios.

Me invento un chiste
cada día sólo por si un
día me dejas hacerte
sonreír.

Imagino el tacto de tus manos
y también el de tus labios.
El entrelazamiento delicado de tus
dedos con los
míos.

Sueño con parar el tiempo
y con él, a ti,
para llenarte de besos
y susurrarte al oído
que tú conviertes
las rectas de mi boca
en curvas porque me
haces sonreír.
Y que ojalá tú te
accidentaras en una
de ellas...
Porque yo te
dejaría.

Sí, sólo a
ti.

Me pierdo en ti en
trayectos de una hora
y busco entre la gente
tus pupilas.
No te encuentro,
lo reconozco,
pero te
reconocería.

Y aunque me haga
la dura cuando tú
me miras en una fracción
de segundo,
me ablando cuando
te miro en
secreto.

Porque si tú me quisieras hoy,
creerías que no te quiero.
Pero mañana me olvidarías
y sabrías que yo, yo sí te quiero
y que lo haría toda la
vida en
silencio.

Comentarios

Entradas populares de este blog

En el centro.

Por escuchar tu voz.

Las batallitas.