La octava maravilla.

"Si te gustan los planetas, 
yo te los llevo a tu puerta.
Y si te gustan las flores,
tu tumba estará llena de 
ellas."


Tienes un lunar que
esconde un planeta el cual
orbita alrededor de tu
ombligo.

Un hueco entre el
hombro y el pecho que
hace que te llame siempre
Hogar.

Siento que piso el suelo
y el cielo contigo,
y que eres mi Casa
allá donde
voy.

Tienes unas cosquillas
graciosas bajo la falda
y una manera de caminar
que desestabiliza
mi balanza.

Te resbalas sobre mis
manos como la lluvia,
y antes de caer, extiendo el brazo
y te agarro por la cintura.

Y te sueltas y saltas desde mi mano,
queriendo romperte.
Y te rompes, como el mar contra las
rocas.

Te abres como las flores
con la salida del sol,
y deslumbras como si fueras un
prisma,
hacia todas las direcciones,
llena de
color.

Eres el nuevo color
del arco iris que sonríe
en la tarde más gris.

Eres el agujero de bala que
no cicatriza, el vacío que
no llena y que vive en la
herida abierta desangrando
y gastando el
botiquín.

Eres la araña que baila
sobre la telaraña y que teje
alrededor de mi
corazón.

Eres la primera canción
que escucho al despertarme
y la última con la que me consigo
dormir.

Escondes la proporción áurea en
la sonrisa, como Mona Lisa.
Eres la octava maravilla que yo
he sabido
descubrir.

Comentarios

Entradas populares de este blog

En el centro.

Por escuchar tu voz.

Las batallitas.