El año en que Plutón dejó de ser planeta... (Titanics e icebergs)

"Tú eres mi as bajo la manga,

mi amuleto de la suerte,

mi trébol de cuatro hojas

y mi beso de buenas noches

en la frente."

El año en que Plutón dejó de ser planeta,
si tú no hubieras aparecido,
las noches habrían sido
eternas.

Siempre he creído que
algunas personas son
un Titanic y de forma
irremediable,
están destinadas cada una
a chocar contra una persona
iceberg.

Algunos,
por desgracia,
no pueden ser Titanics
y no están destinados a
conocer a personas
icebergs.

Nada más conocerte,
sabía que tú serías mi
iceberg pero no cambié
de rumbo, llámame
suicida.

Conocía el iceberg,
su tamaño
pero desconocía
el lugar y el día del
impacto.

Me prometí que
no lloraría, sólo gritaría:
"El iceberg está a punto
de llegar. Salven a los niños,
por favor. Lo aviso de
antemano."

Hubo un momento en el que
ya no me cabías en el pecho
y sabía que si moría,
la causa de mi muerte sería
por tener el corazón
demasiado
grande.

Me hinchaste el corazón
con tus labios y mofletes,
inspirando y espirando
el aire que florecía en tus
pulmones.

Saturaste mi caja torácica
y el pájaro enjaulado
se asfixió de
amor.

Sabía que el impacto
estaba cerca.
Sabía que estaba cerca
el adiós.

Y llegó el día,
lo descubrí porque
el mar estaba en calma
y mi corazón se había
convertido de la noche
a la mañana en un blanco
fácil.

Me quebré en dos
como el Titanic por ti
porque hay ciertas cosas
que duele tanto pensarlas,
que si las dices, eres capaz
de quebrarte en público.
Sin querer.

Y yo las dije gritando.
Grité que te quería,
como si no me doliese.
Y así es como me
rompí. No sabía que fuera
tan frágil... Tú me hiciste
así.

Ojalá pudiera salvarte
o colisionar contigo,
me dije la primera
vez que te
vi.

Ilusa de mí...
Acabaste partiéndome en dos
y a ti ni siquiera te
salió una mísera
grieta.

Algunas personas son el Titanic,
otros el iceberg.
Otros son como Rose y
Jack, y a otros,
por desgracia,
no les dejan ser Titanic
y mucho menos chocar contra
la persona
iceberg.