Peor que el alcohol.

Me sientas peor que el alcohol
porque me mantienes en resaca
durante más de veinticuatro horas.

Es algo que no sé cómo evitar...
¿Quién comprende a los sentimientos?

Tengo una teoría que no se cumple nunca,
una sonrisa anclada a mis mejillas;
tengo unos labios sellados a un cuello de botella
y unos ojos que me han recordado sin saber quién soy.

Y también te tengo a ti,
en un recuerdo atado con cicatrices,
junto al arte de tus manos, a una playa
en diciembre.

Y también nos tengo a nosotros
paseando junto a todo ese azul, prefiriendo antes
oír tu respiración que el romper de las olas.

Y aunque me sientes peor que el alcohol,
prefiero beberte a morro; porque tienes
un beso a-h-í... Y yo no me puedo acercar más.


Comentarios

Entradas populares de este blog

En el centro.

Por escuchar tu voz.

Las batallitas.