Quiero todo de ti.

Quiero hacerte reír
hasta que la vida escuche tu risa de fondo,
porque igual que Luis Alberto habla de tu risa,
tu sonrisa también es una ducha en el infierno.

Quiero hacerte reír
hasta que se te formen dos hoyuelos, uno en cada mejilla,
y sirvan como charcos de agua
para que puedan beber los pájaros.

Quiero verte
hasta que Neruda sólo me hable de ti al oído
y que me abraces tan fuerte que me vuelva adicta a tu piel.
A tu cuerpo, a tu olor.

Quiero mantenerme dentro de ti
como si fueras nido y yo un pájaro
recién nacido que necesita calor.

Quiero todo de ti,
porque si me alejo me voy envenenando más a cada paso que doy.
Tú tienes la cura, amor;
la medicina es tu risa, tus ojos, sentirme dentro.

La medicina son tus besos
y empieza por tus labios.




Comentarios

Entradas populares de este blog

En el centro.

Por escuchar tu voz.

Las batallitas.