Entre tú y yo.

"Cuando una mujer abraza a un hombre,

sólo el tonto mira al cielo

pudiendo mirar en su interior."

Entre tú y yo hay cinco pasos
de puntillas, tres besos en silencio
de labios agrietados y un remolino
guiado por mis dedos
en tu pelo.

Hay un suspiro al verte en mis ojos,
un baile de agujas danzando sobre el reloj y
un pasillo de bailes raros que conducen
a tu habitación.

Hay siete kilómetros de océano
profundo y ciento veinte sirenas
enamoradas de tu corazón.

Veinticuatro fotogramas por segundo
y mil personas dando tumbos
en garitos que tienen puesto
rock and roll.

Una musa con pinta de ser
mitológico ahogándose en un vaso mientras
su poeta se pone ciego de
alcohol.

Cuatro colmillos afilados y seis
mordiscos en el cuello,
dos miradas de incendio
y un rugido de león.

Dos montañas que son pechos,
un baile de salón, diez caricias
y un olor nuevo
desfilando por el edredón.

Dos pies en el salpicadero
y Elvis Presley desatando la locura
en la prisión.

Dos personas en un parking
de una antigua estación, dando
vueltas y vueltas en una escalera
de caracol.

Dos ríos que son brazos que convergen
en el mar, una curva pronunciada
sobre la que acelerar.

Un libro de Geografía y cuatro trapos
rotos mal contados sobre el suelo del salón,
dos escalofríos recorriendo nuestros
cuerpos flacos y un lazo rojo
en la boca de mi estómago.

Dos cervezas,
dos borrachos dándose besos
en el sillón.

Un marinero en su barco
encallado en mi interior,
dos dedos removiendo
un anticiclón.

Un pañuelo blanco
bailando con el viento y diciéndole
adiós.

Un naufragio, dos latidos
y el dedo corazón señalando
al culpable de mis cardenales
y al pirata sin brújula que conoce mis puntos
cardinales a la perfección.

Esto es todo lo que hay entre tú y yo.

Dos libros de poesía versándose,
veinte poemas de Neruda brotando
sobre los almendros en flor.

Dos ancianos caminando
sujetos de la mano
mientras tú y yo locos,
aullando como lobos
viajando en cohete
creando una nueva
constelación.