A todas horas.
Sé que te echaré de menos si no estás
porque ya lo he hecho otras veces
incluso horas después de haber despertado
a tu lado.
Te voy a echar de menos si no estás este verano,
por eso espero que estés,
aunque no sé por qué me seguirías eligiendo a mí
entre todas las flores
que rodean este mundo.
No sé cómo te echaré de menos,
pero sí por qué, sí cuándo, sí cuánto,
por supuesto.
Si ya te echo de menos por no haberte sentido
estas dos noches,
por no haber sentido tu pecho de lobo,
tus párpados de niño cerrados
ni tu silencio en la profunda oscuridad de la noche.
Más te echo de menos si no te siento
en mi costado,
y lo escribo porque no estás aquí,
y porque me falta el aire que no me estás dando
y que me das cuando me miras,
me hablas, tocas mi pierna
y me haces temblar despacio.
Y todo es porque pienso en ti
y respiro tranquila,
y no quiero echarte de menos,
pero te siento en falta todo el tiempo,
todo el tiempo,
a todas horas.
Comentarios
Publicar un comentario